martes, 24 de abril de 2012

SANT JORDI


LA LEYENDA DE SAN JORDI 

 
Hoy, 23 de abril, es día de Sant Jordi y día internacional del libro. Es un día muy importante para la lectura, porque se reivindica la cultura.

Cuenta la leyenda que en un pueblecito de Cataluña sobre el siglo XV había un dragón que atemorizaba a todos los habitantes del lugar. El reino decidió que para saciar el voraz hambre del dragón enviarían un cordero cada día, así estarían protegidos. Sin embargo, los animales del reino se iban terminando y no podían seguir dándole corderos u otros animales al dragón. Así que, como medida drástica, el pueblo decidió que cada día enviarían a una persona elegida por sorteo para que fuera devorada por el temido dragón.
Un día llegó el turno de la princesa. El rey con mucha pena tuvo que acceder, no podía echarse atrás. Así que, con resignación la envió, igual que habían hecho otros habitantes del pueblo con sus propios hijos. Cuando llegaba el turno de uno de ellos, nadie podía echarse atrás por muy doloroso que fuese.
Cuando llevaban a la princesa a la cueva del dragón se encontró con un caballero de  nombre Jordi. La joven le contó que había un dragón que devoraba sin cesar todo lo que se le plantaba delante y que había llegado su día. El caballero después de escuchar la historia, con su valentía y coraje fue hacia donde estaba el dragón. San Jordi con su espada mató al dragón delante de todo el pueblo. El dragón cayó cuando Jordi le clavó su espada en el corazón, de la sangre que brotaba salió una rosal. Jordi cortó una rosa roja y se la regaló a la princesa, regalándole no solamente una rosa, no solamente la vida, sino su amor.
Así pues, Sant Jordi fue un héroe que salvó a la princesa y a todos los habitantes del reino. Desde entonces en señal de amor el día de Sant Jordi, los hombres regalan una rosa a su amada. Como si de un caballero andante que quiere conquistar y demostrar su amor a su princesa. 

Hoy  ha sido 23 de abril, día de Sant Jordi y día internacional del libro. Es un día muy importante para la lectura, porque se reivindica la cultura. 

Día de sant Jordi, día muy importante para Cataluña, porque a pesar de ser un día laborable se siente como día festivo. Se respira por las calles un sabor a libros, a rosas, a alegría.

Si te apetece, si te atreves a adentrarte por el centro de la ciudad de Barcelona, puedes ver todo lleno de paraditas. Puestos de rosas, últimamente de todo tipo de colores. Casetas con libros, libros que venden, o bien, con los autores de esos libros. Esos escritores pasan de ser un nombre, de ser alguien que te ha hecho viajar, a ser una persona como tú. Puedes dialogar un poquito contigo, puedes llevarle el libro y que te lo firme. En algunos casos por una dedicatoria, como hay tal cantidad de gente, tienes que esperar bastante, pero merece la pena. 

No sé desde cuando se celebra esta tradición en Cataluña, pero sé que desde que yo tengo razón de uso existe. Recuerdo que cada 23 de Abril en el cole nos contaban la  fabulosa historia de Sant Jordi y el dragón. Sí, la leyenda era repetida año tras año. Al principio, nos la contaban y después teníamos que pintar al dragón, al caballero que salvaba a la princesa y a la rosa. A la vez que iban transcurriendo los años, profundizábamos más en la leyenda, emplástica hacíamos rosas de papel para llevarlas a casa.  Más adelante, se celebraba el concurso de poesía y narrativa. Se celebraba ese día, porque a parte de ser el día del patrón de Cataluña, también se conmemoraba la muerte de dos grandes escritores de la historia: Shakespeare y Cervantes, según decían, murieron el mismo día. Así pues, se celebra el día Internacional del libro.


A parte se considera un día muy simbólico para la cultura catalana, porque se celebran los llamados “Jocs Florals” que son certámenes de literatura de la lengua catalana. Este certamen se celebra desde el siglo XIV. Esta celebración era una forma de dar a conocer a los escritores más emblemáticos de la época, todos aquellos que se presentasen al concurso. Para ello tenían que presentar sus escritos en catalán como forma de promocionar la lengua, la literatura y la cultura de la patria catalana. Por eso era mucho más que un concurso, más que un ganar o perder, una forma de que la cultura catalana se hiciera presente en la sociedad y cultura. Este certamen fue censurado en varias ocasiones como represión de la lengua catalana, la primera vez fue durante la dictadura de Primo de Rivera, aunque durante la  2ª República fue recuperado. La segunda vez que, como represión de la lengua y cultura catalana, fue durante la dictadura de Franco. Por suerte, en 1978, con la democracia instaurada en nuestro país, todo el mundo podía pensar, hablar y expresarse en la lengua que le diese la gana. Volvían las libertades y la cultura podía seguir creciendo, cultivándose y seguir hacia delante. Como cada día, con más y mejores medios,  vamos haciendo.  De todo se aprende, quizás por ello me guste la historia. Sé que no sirve de nada, somos humanos y somos los únicos que tropezamos en la misma piedra  una y otra vez, pero más vale tener presente los errores que se han cometido durante lo larde de la historia para poder esquivarlos, o bien para saber que hubo gente que no podía expresarse, sentir, ni vivir como querían.  

Deseando que hayas vivido un día lleno de libros, rosas y cultura. Me despido con el ánimo de que la lectura llegue a todas partes, de que el día del libro no sea solamente el de un día y cada día abráis un libro para poder viajar, soñar y disfrutar con la lectura. Cada día hay una capítulo en vuestras vidas que forma la mejor novela: vuestro propio libro. Cada uno lo escribe como quiere, lo malo que a veces no sabemos leer ni releer lo que vamos escribiendo durante nuestro día a día. No nos acordamos, no sabemos ver lo que hemos hecho, porque lo que hemos hecho ya está hecho y hay que seguir escribiendo capítulos sin parar, ya que la vida no tiene pausas publicitarias y hay que seguir adelante rellenando esas páginas en blanco que están y vendrán.

martes, 17 de abril de 2012

100 años del Titanic

Efemérides: 15 de Abril del 2012
¡Ay, ay, ay! El tiempo pasa volando, más que volando. Casi sin darnos cuenta pasamos de un segundo a un minuto y de un minuto a una hora y así van pasando los días. La semana pasada quería haber escrito para haber realizado un homenaje a la efeméride del Titanic y a todas las víctimas de la tragedia. Sin embargo, hemos empezado otra semana y no lo he hecho.
El día 15 de Abril, domingo fue el aniversario de dos acontecimientos: uno más personal y otro a nivel histórico. El primero, era el cumpleaños de alguien que ya no se encuentra aquí en este mundo con nosotros. Sin embargo, me sigo acordando de su día, de su persona y de lo que fue para mí. Ella era mi abuela, mi yaya. Y aunque ahora no esté aquí, he vivido tantas cosas con ella, que aún me gustaría que estuviera por aquí, ya que hay mucho que se quedo por ver, conocer y sobre todo yo de conocer de ella. Nunca te cansarías de conocer a alguien. Nunca te cansas de querer a alguien, de añorar. Quizás, ella nos esté observando por alguna mirilla desde algún lugar. Puede ser. O no. Se puede alegrar de muchas cosas que ve, pero de otras también se puede sentir muy triste. Sin embargo, ella ya no está aquí para que se exprese. Ella vivió lo que tuvo que vivir, así es la vida.  Así es el destino pone inicio y final a la vida y a las situaciones que nos vamos encontrando por el camino. 

La otra efeméride que se celebró el domingo fue el centenario del hundimiento del Titanic. Famosa historia conocida por la escarizada película de James Cameron. Película que fue tan premiada en la época por sus actores, por su banda sonora, efectos especiales y sobre todo por los detalles de una historia real. No todo lo que se cuenta en la película es real, pero es lo que tiene la ficción que por mucho que esté basada en un hecho real no tiene porque ser igual al 100%. James Cameron incluyó una fantástica historia de amor dentro de la tragedia, eso no sabemos si fue real o no. No hay nadie que lo atestigüe. Sin embargo, lo que que sabemos es el nombre del personaje que interpreta el actor Leonardo Di Caprio, Jack Douson, que existió. Este hombre, irlandés, estaba embarcado en el “insumergible”. Era carbonero y trabajaba en las calderas. Para nada su historia fue como la que narra la película. Él estaba casado, ya había hecho viajes en trasatlánticos, y esta se había enrolado en la travesía, porque su cuñado iba también con él trabajando. Un trabajo duro donde los haya. Cuentan que cuando estaban mareados, les tumbaban, les tiraban un cubo de agua para espabilarlos y tenían que seguir para ganarse el jornal. En 1912 las clases sociales estaban muy separadas. Así que mientras en ese barco viajaban ricos de la época, primera clase, privilegio solamente de algunos. Otros trabajaban sin cesar para que ellos disfrutasen de su maravilloso y soñado viaje.  Las diferencias de clases siempre han existido y  existe, pero cuando se dan situaciones exageradamente trágicas, no vale el dinero, ni tu clase. En este caso que valía, porque se salvaban según en que clases estaban, empezando por mujeres y niños. Se demostró la clase humana, cuando muchos hombres de primera clase se podían haber salvado y dejaron que en su lugar fueran mujeres con bebés. No sabemos realmente lo que ocurrió. A pesar de saber que chocaron con un iceberg. Sin embargo, aún me sigo preguntando cómo en un barco tan preparado pudo suceder. Pero las grandes catástrofes suceden sin explicación alguna.
 Siguiendo con el Titanic...durante estos días nos han bombardeado de documentales, noticias, homenajes y demás sobre ello. Aún siguen investigando el alcance de la tragedia. Aunque poco a poco el gigantesco barco va despareciendo. Dentro de unos años no quedará resto, solamente estará en la memoria de algunos. El barco no se puede rescatar, porque al estar en aguas internacionales no pertenece a ningún país en concreto. Además está muy estropeado por las condiciones en las que se encuentra, a más de 4000 metros bajo el mar, con lo que con lleva: bacterias, aguas gélidas y el paso del tiempo. Me pregunto muchas cosas, pero que muchas de ellas no se pueden responder. Otras sí, pero tampoco es plan de hacer una tesis del Titanic. Una de las preguntas es cómo era posible que alguna gente tuviera objetos de dentro del barco, ya que no creo que en los últimos momentos de tu vida pienses en robar, aunque hay gente para todo. Sin embargo, el instinto de supervivencia es el que es. Las mareas debieron hacer que flotasen. ¿Pero los platos flotan? Según el principio de Arquímedes un cuerpo total o parcialmente sumergido en un fluido en reposo, recibe un empuje de abajo hacia arriba igual al peso del volumen del fluido que desaloja
Y por último, este blog lo empecé antes de ir a Irlanda. Pues el Titanic tiene mucho que ver con ello. Cuando fuimos a visitar el Norte de Irlanda, fuimos a Belfast y allí vimos el astillero donde se construyó el famoso trasatlántico, un agujero inmenso donde estuvieron trabajando para crear un potente e gigantesco barco. Pero de allí no salió, sino que partió desde Cork, Irlanda. Lugar que no visitamos, pero como siempre se dice más vale dejar algo que ver, para luego poder volver y poder visitarlo. 


viernes, 6 de abril de 2012

Así se siente ABRIL

ABRIL



Así se siente Abril. Justo hoy hace seis días contados que ha empezado Abril. Casi unasemana. Y como bien dice el refranero español: “En Abril, aguas mil” A pesar de que durante los dos primeros días parecía que de la primavera habíamos pasado directamente al verano, porque hacía demasiado calor para el tiempo en el que estábamos. Parece que al tercer día despertó y empezó a hacer acto de presencia el mes de Abril.
Estamos en Semana Santa y para los que tuvieran planes, parece que el tiempo no les va a acompañar. Aunque según se mire, porque ya tocaba que las tierras fueran regadas con agua natural. Los ríos estaban sedientos y necesitaban beber algo de lluvia. Y así es, tan santa que ha logrado un milagro: la maravillosa lluvia. 
Particularmente, a no me gusta mucho la lluvia, prefiero el Sol, anima mucho más. Pero siendo realistas, necesitábamos lluvia. Además, creo que después de haber estado un año por Dublín, no le tengo tanta manía a la lluvia. Cuando amanece el día con un día oscuro y lluvia me traslado sin querer a Dublin, y pienso: “un día irlandés en Barcelona”, incluso parece que me alegra.   

En abril, a parte de llover, suceden muchas más cosas. Al estar en primavera, al haber ganado una hora más de luz, los pájaros cantan con alegría y muy alto. El verde y las flores hacen acto de presencia, llegan frutos que hasta ahora no se podían ver con tanta frecuencia, como: las maravillosas fresas, ciruelas, cerezas. ¡qué ganas tengo de comer cerezas! 

No cómo irá el mes de Abril, porque acaba de empezar. Entre aguas está y no cómo continuará. Ahora está muy parada la cosa, a parte de por la situación pésima en la que estamos a nivel económico, también influye que estemos en plena Semana Santa.

Semana Santa que mucha gente, a pesar de la maldita crisis, aprovecha para hacer escapadas. Escapadas que en algunos casos se ven arruinadas por las lluvias. Otros, en cambio, siguen el transcurso de la vida como si de una semana normal y corriente se tratara, y es que así es, sobre todo si no trabajas y tienes fiesta todos los días. Así que, a no me influye para nada. Estoy parada y sea festivo o no, cada día es igual. Se nota que estamos en Semana Santa, no porque vaya a comer torrijas- que no me gustan-, ni porque vaya a ir de procesiones- nada típicas en Barcelona-, sino por las noticias, por las escapadas de amigos y conocidos, por los establecimientos que cerrarán el Viernes Santo y por las películas que se suceden año tras año por esta época del año.

A pesar de que he dicho que es un bien, porque el agua es un bien escaso y siempre va bien que llueva. Todo es bueno en su justa medida. que para algunos no les habrá sentado muy bien, aquellos que querían aprovechar estos días para escaparse a la playa y darse el primer baño del año, para los que desean que llegue esta época para salir con sus cofradías y salir en procesión con sus santos. Pero llueva o no llueva saldrán y disfrutarán. Cada uno a su manera, con sus aficiones, con sus placeres o con lo que les venga en gana hacer. Nada ni nadie impedirá que cada uno de nosotros disfrutemos. Sea semana santa o una santa semana como otra cualquiera.