KENZIE CUMPLE 6 AÑOS
Ya estamos en otoño, pero en esta ocasión nos colaremos por
las últimas rendijas de verano, para recordar un hecho. El pasado día 18 de
septiembre, Kenzie cumplió 6 años. Como era su aniversario y quería que fuera
un día especial, aprovechando que estoy sin trabajar, tuve la oportunidad de
que disfrutase de su día. ¿Cómo? Pues llevándole a su sitio preferido: la
playa.
El día anterior quedé con una amiga, para que fuese
partícipe de ese día. Así que, quedamos y fuimos caminando. A Kenzie le tocaría
trabajar un poquito, pero después obtendría una recompensa. Cuando llegamos,
cuál fue nuestra sorpresa, que la playa estaba llena de bañistas que
aprovechaban los últimos días de verano. Además, tuvimos la suerte que ese día
el Sol estaba presente y hacía un día digno de ir a la playa.
Sin embargo, yo quería ir y dejarla libre, para que
saborease la libertad de hacer lo que quisiera en la playa. Ella, como perro
guía, puede ir siempre que quiera a la playa o cualquier sitio, pero ejerciendo
su labor de perro guía. Pero, como yo quería que disfrutase como perra, antes
me informé ya que sabía que rondaba por esas fechas la época alta para que los
perros puedan disfrutar de la playa.
Según la ordenanza municipal de Barcelona, durante la
temporada alta de bañistas que comprende: del 1 de Junio al 16 de septiembre,
los días de Semana Santa y todos los fines de semana de abril a octubre no se
puede acceder con el perro suelto a las playas, para que haya una mejor
convivencia entre bañistas y perros.
Así que, aprovechando que el cumpleaños de Kenzie cayó en
miércoles, día laborable y era 18 de septiembre, pudimos ir y que ejerciera de
perro libre, suelto y con toda la libertad que quisiera. A pesar de ello, como
digo, había demasiada gente, y por mucho que se pueda me daba cosa que
Kenzie molestase a los bañistas que estaban por ahí tomando el Sol.
Al final, encontramos un hueco cerca de la orilla, donde
parecía no había mucha gente alrededor nuestro; y allí acampamos con las
toallas. Eso sí, no pudimos tirarle el freesbe, no fuera a ser que diéramos a
alguien. Pero, qué más daba ella lo que quería era ir a pegarse un
baño. No hacía falta que nada ni nadie le incitase a ir al agua. Hacía calor,
por tanto en cuanto se vió suelta se metió corriendo al agua. Su pasión
era bañarse, salir, revolcarse en la arena, secarse, correr y volver a
bañarse. La gente de alrededor, al contrario de lo que yo pensaba, que se
enfadarían por el alboroto que estaba formando, disfrutaban viendo cómo
se lo pasaba Kenzie. Además, era muy gracioso ver cómo se ponía como una
croqueta.
A pesar de mis temores de no ver a ningún perro rondando por
los alrededores, de ver que estaba llena de bañistas, gente tomando el sol y
turistas pro todas partes, pude lograr mi objetivo, que Kenzie pasase un
buen día de cumpleaños haciendo lo que más le gusta hacer: bañarse, revolcarse
y correr por la playa.
Ya tiene 6 años, pero no deja de ser un perro que en cuanto
puede volver a ser un cachorro y juega como la que más. Sí que he notado
que con el tiempo es más tranquila y ya no se altera con tanta facilidad,
guía muy bien , si cabe, mejor de lo que lo hacía, porque evita coger
cosas, ya que sabe que me enfada. Pero, también aunque sea un perro guía que me
ofrece tanto, también necesita recibir momentos de ocio,
y desfogarse corriendo y sociabilizándose con otros perros.
Disfruta mucho y creo que es necesario, tanto como para que aga deporte,
como para que se desestrese de la atención que tienen que poner diariamente
cuando lleva el arnés y me está guiando. Una vez no lleva el arnés es un perro
normal que, al igual que todos los perros, quiere y desea jugar.
Para muestra un botón, y os dejo el vídeo que grabó mi
amiga, que se quedaba alucinando de cómo se lo pasaba Kenzie:
Nació en otoño como yo.:D Espero que las ordenanzas sobre los perros en lugares públicos y transporte público sean adecuadas y no excesivas y restrictivas para los perros.Lo ideal sería que fuera igual en toda la unión europea.
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