No hay problemas, hay soluciones.
El
mejor resultado de un problema es que tenga solución. No se puede
quedar la incógnita sin resolver. Siempre se me han dado mal las
matemáticas, pero me he dado cuenta que la lógica está en todas partes,
en todas las facetas de la vida. Sin embargo, esta entrada no pretende
ser una explicación de las matemáticas, ni de problemas, ni de
ecuaciones. He querido comenzar con un símil de la importancia que es
encontrar la solución de un problema. Pero, también se puede hacer el
símil con un laberinto, en el que te chocarás mil veces hasta llegar al
fin a la salida, porque aunque a veces pensemos que no hay salidas las
hay, solamente hay que perseverar, no rendirse y seguir buscando hasta
encontrar.
Me
encantaría que este post estuviera relacionado con que hemos encontrado
trabajo, que después de perseverar e insistir lo hemos conseguido.
Seguiremos siendo constantes y aunque las fuerzas flaqueen seguiremos
levantándonos hasta que un día encontremos esa salida tan ansiada. Este
post no viene por nada en concreto. Simplemente, que como dice el
título: no hay problemas, hay soluciones. Cuando te ves envuelto entre
dificultados y parece que no hay salidas no hay que pensarlo, porque si
no te sumerges en un arrecife que te atrae hacia él y no te deja subir a
flote. Así que el pensamiento positivo y saber gestionar nuestros
sentimientos hace mucho para que no nos hundamos. Ahora es cuando me
río, me río de mí misma por estar escribiendo esto, ya que yo soy la
primera que me ahogado varias veces. Qué fácil es la teoría y qué
difícil llevarla a la práctica, eso sucede en todo. Me da hasta
vergüenza escribir esto, pero me ha dado el puntazo. No estoy hundida,
he salido a flote, me sé la teoría y porqué no escribirlo.
No
pretendo escribir una entrada de autoayuda, aunque lo parezca. Sin
embargo, el otro día escuché esta frase “no hay problemas, hay
soluciones” y me hizo mucha gracia. Es fácil decirlo cunado no los
tienes tú los problemas. Pero, luego pensé más a fondo en la frase y
pensé que es cierto, todo depende en según como los plantees. Entra en
juego la lógica, si te planteas que hay una solución te será más fácil
seguir adelante y luchar para encontrar la salida que quedarte bloqueado
y estancado pensando que hay demasiados problemas y que no tienen
solución. Para todo hay solución, de una manera u otra, pero la hay. No
hay solución para la muerte. Hay solución y múltiples para la vida.
Algunas nos gustarán más, otras menos y otras ni las pensaremos, pero al
fin y al cabo son SOLUCIONES.
Sin
duda, para esta entrada le acompaña la banda sonora de Jarabe de Palo
“Depende”, porque todo depende del momento anímico, de la persona, del
pensamiento, del lugar, de las circunstancias todo depende.
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